La investigación informa que el efecto beneficioso del sueño sobre la creatividad puede mejorarse mediante la incorporación de un aroma. En un estudio reciente, los participantes se congregaron en un laboratorio por la noche y vieron un video de 10 minutos sobre el trabajo voluntario. Después de ver la película, se les dio la tarea de pensar en formas innovadoras de alentar a las personas a ofrecer más tiempo como voluntarios. Para algunos de los participantes, un difusor de aroma oculto difundió un aroma mientras los participantes miraban la película. Antes de acostarse, se les entregó un sobre que contenía un segundo difusor de aroma, que se les indicó que abrieran antes de dormirse. Los participantes restantes no estuvieron expuestos a ningún olor, ya sea mientras dormían o estaban despiertos.
A la mañana siguiente, todos tuvieron dos minutos para enumerar las soluciones creativas que se les ocurrieron. Los evaluadores puntuaron todas las ideas en una escala de creatividad y encontraron que las ideas de aquellos que se acostaron con el olor eran mucho más innovadoras que las de aquellos que se habían acostado sin ningún olor.